Día 5,6 y 7. Puerto Madryn: Avistaje de ballenas y pingüinera.

Por fin llegaba el día tan y tan esperado por todo el grupo.... el avistaje de ballenas.

Llegamos a Punta Piramides y allí nos colocamos unos chalecos naranja cantón de super diseño...y fuimos al encuentro de las ballenas en uno de los barcos que salían del mismo puerto....pinta de turistas??? Nooooooo!

Es imposible poder describir qué se siente cuando estás presenciando algo tan bonito, desconocido y a tan poca distancia en ese momento.... Increible la experiencia !!!!

El guía nos explicó que las ballenas que íbamos a ver eran todas hembras acompañadas, cada una, de su cría. Después del año de embarazo, las mamás acudían a las costas. Allí sólo se centraban en su pequeño, por lo que jamás iban en grupo. La hembra amamantaba a su bebé hasta los 6 meses, jugaba con ella, la enseñaba a ser independiente y al año...se separaban...como aquí en España que nos independizamos a los 30!!!!

Mamá ballena con su cría

Lo más impresionante fue ver cómo saltaban las 30 toneladas de cetáceo a tan sólo 100 metros de distancia.... el silencio del océano roto por el sonido de la ballena rompiendo el agua!!!!

Rubén no paraba de disparar y disparar! Parecía un paparazzi....pero pilló la gran imagen!!! (después de seleccionarla entre 300 fotos en 1 y media). Juan, recuerdas nuestro último viaje a Cortina d Ampezzo??? Creeme, el disparador iba lento aquella vez!

Una vez vimos el gran espectáculo, de partida de nuevo con nuestra pick up!!!! Pedro, nuestro guía particular, nos hizo pasar un día espectacular, llevándonos por toda la península durante 400 intensos Km. Durante el recorrido nos fué explicando particularidades de la fauna y flora de allí. Entre tantas horas de coche hubo tiempo también para hablar sobre Argentina y sus gentes.

Destino: Recorrido por Península Valdés hasta llegar a Punta Delgada. Allí un encuentro con Elefantes Marinos....a partir de hoy si me llaman foca no me voy a ofender...No son preciosas???? Todo el día tumbadas al sol en la playa!!! (Nuestro sueño eh, Susana!!!!).

También tuvimos ocasión de conocer vuestros orígenes, Juanaco y Juanaca. Son los llamados guanacos:

Guanaco en Puerto Pirámides

Caballos que también puidmos contemplar

Aunque en Argentina no hemos podido ver el mismo número de bares y bancos que en España, si que te puedes encontrar una oficina bancaria en cualquier lugar. Esta es las que llaman de última generación:

Al día siguiente nos acercamos a Punta Tombo para ver una colonia de 500.000 pingüinos (más bien era una ciudad de pingüinos). En esta época del año están incuvando los huevos. Es una tarea que hacen entre el macho y la hembra, a partes iguales!! Que avanzados, casi como nosotros!!! Eso sí, casi nunca están juntos en el nido. Tienen vidas independientes: mientras uno permanece en el nido, el otro durante una semana va a buscar alimento. Pero puede pasar que no encuentre alimento suficiente, y sencillamente no vuelva. Y el otro que estaba en el nido, ¿pensáis que se cabrea? Un poco si, porque el otro tiene que ir entonces a buscar el alimento y dejar el nido sólo. ¡¡¡Y ya la hemos liado!!! Huevo perdido!!! Otros animalitos se lo comerán gustosamente.

Y que pasa entonces??? Que como no les ha ido bien en ese nido, no vuelven nunca más a ese nido.

Todo muy cotidiano y natural.

Ahí os dejamos un par de fotos de las miles que hicimos sobre los pingüinos. En Batman podéis ver más.



Pingüino en su nido



Uno que nos vino a saludar

Como veis paseamos muy cerca de ellos, y ellos también querían ser protragonistas de nuestras fotos

Ese le dio la espalda a Mar

Un huevo de pingüino

Como podéis ver en este vídeo, los pingüinos obedecen a Rubén:

Después de ver miles de pingüinos, nos dieron una vuelta por la comarca. Pensad que en 2 días hicimos unos 700 Km en un 4x4. Estuvimos en Trelew y después nos llevaron a un pueblecito Galés a probar sus fantásticas tortas y estupendo té. Un festival y orgía de calorías no apto para diabéticos. Como dice Frank (y lo sentimos Pedro si nos lees), nos tragamos la excursión. Jose, esto es lo que se llama, un timaco! Pero en Argentina es todo macanudo.

El pueblo en cuestión se llama Gai-man. Dicen que se creó porque unos galeses vinieron a la Argentina a hacer la nueva gales, ¿será así la historia?

La orgía de calorías con su tetera



Efecto de las calorías de Gaiman

 Este fué nuestro hogar en Puerto Madryn.